Hace meses empezamos este fantástico viaje de maridar té con otros alimentos.

El maridaje del té es mucho más que una simple combinación de sabores. Es una experiencia sensorial que busca realzar el placer al ingerir tanto el té como los alimentos, explorando las sinergias y contrastes entre ambos. Con la combinación adecuada, se pueden descubrir nuevos matices y profundidades de sabor que hacen que cada bocado y sorbo sean verdaderamente inolvidables.

Existen múltiples posibilidades de combinar el té con la comida. La clave está en encontrar la armonía entre sabores y texturas para crear una experiencia gastronómica memorable.

Pistas para maridar

Antes de embarcarse en un maridaje del té, es esencial comprender las características individuales tanto del té como de los alimentos que se desean combinar. Esto implica analizar cada elemento para entender su perfil de aroma, sabor y textura.

Una vez identificada cada característica, es necesario decidir qué se desea resaltar en la experiencia de maridaje. ¿Se buscan reforzar ciertas notas… o atenuar otras? Esta decisión influirá en el tipo de maridaje a desarrollar.

Además de la impronta del sentido del olfato y de la vista, es crucial recordar las sensaciones táctiles asociadas al sentido del gusto. La suavidad, la cremosidad, la frescura o la picantez pueden influir en cómo percibimos los sabores y complementar la experiencia de maridaje.

Es fundamental tener en cuenta la temperatura del té, en ciertos casos, un té demasiado caliente podría afectar negativamente nuestra experiencia. Salvo que hayamos previsto utilizar té frío o la modalidad de coctelería (cócteles con té), es recomendable mantener una temperatura que preserve los aromas y sabores de los tés a degustar.

Y recordemos, resulta crucial elegir cuidadosamente los tipos de té a maridar. Por ejemplo, si vamos a utilizar tés verdes es clave diferenciar entre los perfiles de los tés chinos y los japoneses, para aprovechar las notas más dulces y/o florales de los primeros… o las notas marinas o próximas a los vegetales hervidos de los segundos… Si nos referimos a los Oolongs, fundamental tener en cuenta su grado de oxidación. Si hablamos de los tés negros absolutamente determinante la zona de producción. Los Pu erh son un mundo aparte…

Prueba nuestras catas de maridaje y descubrirás un mundo desconocido a tu alcance.